Detalles: El único lanzamiento de Flaming Tunes es quizás la mejor elegía a la filosofía de la grabación casera de los 80 que jamás hayas escuchado. Publicado originalmente en 1985 en casete (con portadas coloreadas a mano individualmente), este álbum homónimo surgió de la colaboración entre los amigos de la infancia Gareth Williams y Mary Currie. Williams es más conocido como miembro de la banda inglesa de art-rock This Heat. Tras dejar el grupo a principios de los 80, viajó a la India, donde estudió danza clásica Kathakali, una experiencia que marcaría profundamente la música de Flaming Tunes. En una antigua casa victoriana del sur de Londres, el dúo grababa durante el día mientras el hijo pequeño de Currie iba al colegio y Williams dirigía las grabaciones por la noche. A ellos se unieron varios invitados, entre ellos el guitarrista de This Heat, Charles Bullen, y sus colaboradores de siempre, Martin Harrison y Rick Wilson. Usando los instrumentos que tenían a mano (clarinete, piano, campanas, etc.), Flaming Tunes crea melodías lo-fi con arreglos sencillos, ritmos oblicuos y sonidos naturales densamente estratificados. El resultado es un collage hipnótico de ensoñaciones instrumentales y canciones pop desviadas, que se entremezclan en una confluencia nebulosa de folk psicodélico de Canterbury de finales de los 60 y la experimentación de los primeros Residents. Todos estos elementos cautivadores convergen de una manera personal, insistiendo silenciosamente en los oídos de los oyentes, como la sangre que late en las venas en un cálido día de verano.