Detalles: Si bien el universo musical del guitarrista Ben Monder es vasto, el camino hacia sus galaxias auditivas es bastante solitario y arduo. A Monder le toma un tiempo considerable crear sus grabaciones únicas y alucinantes, ya que la práctica, la escultura y los arreglos pueden llevar años. Su último disco, Planetarium, es una obra de arte prodigiosa que muestra la más amplia visión de su compositor y artesano. Monder es reconocido por sus extraordinarias contribuciones con la guitarra a una amplia gama de artistas, como David Bowie, Maria Schneider, Guillermo Klein y, más recientemente, como miembro de The Bad Plus. Si bien es más reconocido por estas contribuciones, sus propios proyectos merecen la misma atención, ya que son obras personales y a gran escala que cuentan con la colaboración de un selecto grupo de colaboradores de confianza. Los inicios de Planetarium comenzaron en 2014 cuando Monder recibió una beca de The Shifting Foundation para escribir y grabar un álbum. Si bien ese proyecto finalmente tomó un rumbo diferente, el trabajo en este continuaría durante los siguientes diez años. El esfuerzo cobró un impulso con la llegada de la pandemia, ya que había pocas distracciones para componer y practicar. Durante este tiempo, Monder también recibió el encargo de componer lo que se convertiría en la ambiciosa pieza "Ataraxia". Una de las colaboraciones más provechosas para Monder ha sido la del ingeniero y productor Joseph Branciforte, cuyo Greyfade Studio en Mount Vernon, Nueva York, se convirtió en una especie de segundo hogar para él durante el proceso de grabación. A partir de diciembre de 2020, ambos comenzaron a reunirse frecuentemente en el estudio, compartiendo ideas e invitando a colaboradores a aportar sus singulares contribuciones. Entre estos invitados clave se encontraban los bateristas Ted Poor y Satoshi Takeishi, el bajista Chris Tordini y los vocalistas Theo Bleckmann, Charlotte Mundy y Emily Hurst. Tras tres años de grabación, Monder produjo su mayor declaración como compositor y conceptualista. Este conjunto de tres discos incluye poemas sonoros extensos y de gran elaboración, así como momentos espontáneos de brillante improvisación.