Detalles: Adalbert Gyrowetz es uno de los numerosos y talentosos músicos checos del siglo XVIII. Recibió una excelente educación en Praga y posteriormente se trasladó a los centros musicales de Europa. Su música está fuertemente influenciada por el lenguaje clásico de Haydn. Estructuras arquitectónicas, progresiones armónicas de tensión, instrumentación, disposición cíclica, representación del afecto y la idea general de la música como un lenguaje equilibrado de sentimiento y razón dominan la estética de este estilo. Los cuartetos para flauta y trío de cuerda constan de tres movimientos con una secuencia de tempo rápido-lento-rápido. Alrededor de 1800, esto era más bien la excepción, ya que los cuartetos de cuerda maduros de Haydn ya habían establecido cuatro movimientos. La duración de las piezas es aproximadamente la misma que la duración total de una obra de cámara "normal" de cuatro movimientos de la época. Además, es interesante que las voces, especialmente las de flauta, violín, pero también viola y violonchelo, presenten solos rápidos y virtuosos. Gyrowetz escribe así un ciclo de tres vibrantes cuartetos que pretenden ser nada más que divertimentos virtuosos y diversiones con mucho espíritu. ¡El compositor lo ha conseguido!