Detalles: A pesar de ir y venir en un abrir y cerrar de ojos, los River dogs siempre han sido tenidos en alta estima. Claro, muchos actos de bajo rendimiento son colmados de aclamación, pero si un grupo realmente merece una reevaluación, los River dogs son tan merecedores como es posible conseguirlo. Y la razón no es solo porque la banda contó con la presencia del ex guitarrista de Dio y Whitesnake (y futuro Def Leppard) Vivian Campbell. Formada en Los Ángeles en un momento en que el hair-metal era el rey, estaban decididos a evitar los clichés, adoptando un estilo bluesero, casi americano, donde la moderación era central y el exceso mal visto. Naturalmente, Vivian Campbell jugó un papel influyente en la configuración del paladar musical, pero tanto el bajista Nick Brophy como el vocalista Rob Lamothe también atrajeron la atención inmediata. Cálida, dominante e instantáneamente identificable, la voz de Lamothe no dependía de la grandilocuencia para hacerse notar. Producido por Michael Frondelli (Kiss, Rolling Stones) y perfeccionado por Jeff Glixman (Gary Moore, Georgia Satellites), su álbum fue aclamado universalmente. Uno de los discos más olvidados de todos los tiempos.