Detalles: Prensado en vinilo. Cualquiera lo suficientemente imprudente como para encasillar a Angel Olsen según Burn Your Fire For No Witness de 2013 se verá obligado a repensar su tercer álbum, My Woman. La producción más nítida y potente del anterior ha desaparecido, pero ese fuego arde con mayor intensidad. Su voz cautivadora y atemporal es aún más prominente. Sin embargo, la extraña y cruda potencia y los conjuros que se despliegan lentamente de sus trabajos anteriores permanecen. En sus dos álbumes anteriores, nos regaló desmayos poéticos envueltos en reverberación, folk sombrío, ejercicios de banda grunge-pop y epopeyas inquietantes, grabadas con los dedos. My Woman es un complemento estimulante para su trabajo anterior, y para el cual Olsen recalibra su enfoque y métodos de composición y grabación para entrar en una nueva fase musical. A medida que el disco evoluciona, se tiene la sensación de que la "mi mujer" del título es la propia Olsen, con total control, pero también dispuesta a ceder ante la influencia de colaboradores y circunstancias. Un disco intuitivamente inteligente, cálidamente comunicativo y audazmente generoso, My Woman llega a todos. Su capacidad para superar las expectativas es otra de sus fortalezas.