Detalles: Del abismo musical moderno surge Jackson Scott, un artista de 22 años residente en Asheville, Carolina del Norte. Encontrando pura euforia metafísica en las profundidades de las grabadoras de casete y los pedales de guitarra, disfruta de las cosas simples de la vida, como tocar música con amigos y sumergirse en vacíos existenciales. Tras una extensa gira en 2013 para su álbum debut, Melbourne, publicado por Fat Possum Records, Jackson regresó a casa para grabar un álbum que pudiera escuchar en absolutamente cualquier estado mental, negativo o positivo. Su segundo álbum, Sunshine Redux, es una traducción de esta psique paradójica, un caleidoscopio de sonidos que abarca desde el flower power de los 60 hasta las técnicas de producción del hip hop de los 90. Oscilando entre explosiones nihilistas del punk rock y suaves pesadillas sónicas, es su proyecto musical más cohesivo hasta la fecha.