Detalles: Un nuevo EP de Troth, tras su brillante tercer álbum, Forget The Curse, lanzado a principios de este año. ¡Una especie de EP, ya que estas seis maravillosas canciones suman más de 31 minutos! ¿Un EP doble de un solo disco? Sea como sea, Idle Easel muestra a la banda en un período de transición, ya que el dúo de Amelia Besseny y Cooper Bowman dejó Newcastle para trasladarse a Hobart, Tasmania, durante las sesiones de grabación. El disco transmite una profunda sensación de dejar algo atrás por algo nuevo, una sensación que se ve reforzada por la presencia melancólica y otoñal que recorre Idle Easel. Escuchar estas canciones a todo volumen en una Gotemburgo actualmente muy lluviosa, en pleno otoño, sin duda suma, pero hay más que eso. "Wolkenträume" combina grabaciones de lugares destacados de Tasmania con melodías de teclado sobrias y cantos angelicales, que, tras un lento descenso tras un intenso periodo con Ron Nagorcka, se siente como el puente perfecto de vuelta a la cruda y fría realidad nórdica. "Autumnal Hymn" es una de esas canciones de piano minimalistas y encantadoras, cortesía de Amelia, con armonías que solo podrían ser de Troth. A mitad del EP, la peculiar "Kind Of Cure" es casi como un limpiador de paleta. De una densidad exquisita, aunque no precisamente alegre, una interpretación algo excéntrica y exuberante de la música folk. "Angel Not So Easy" tiene esa atmósfera de club nebulosa, proveniente del mismo lugar que la canción principal de Forget The Curse y la cara A del 7" de IDDB, manteniendo siempre ese glorioso toque "DIY". «Sunflower» explora aún más la mezcla de ritmos y saxofón que se insinuó en el álbum anterior, aquí con cualidades temblorosas y mareantes de la mejor calidad. En «Sentimental Object», el tema de cierre, se perciben rastros de los primeros tiempos de Troth en casete. — Matthias Andersson / Discreet Music, octubre de 2023