Detalles: Mientras un péndulo oscila entre dos extremos, la neoyorquina Aisha Badru traza un camino firme y deliberado en su álbum debut. Los extremos que denota el título del disco son emocionales, más que sonoros, ya que Badru explora tanto los máximos abismales como los mínimos devastadores con la misma ternura y elegancia en cada ocasión. «Un tema fundamental en la experiencia humana es que oscilamos constantemente entre el bien y el mal», explica. «No podemos evitarlo. Al darnos cuenta de que estos vaivenes no son permanentes, comenzamos a desarrollar la capacidad de controlar cómo nos sentimos ante los sucesos desafortunados que puedan surgir en nuestra vida».