Detalles: 1953 fue el tercer año de «Nueva Bayreuth», estableciéndose el patrón anual de dos ciclos de El Anillo, varias representaciones de Parsifal y dos dramas más, uno de ellos en una nueva producción. En 1953, la mayor crisis fue la ausencia de Hans Knappertsbusch, quien en los dos primeros años ya se había convertido en la columna vertebral de la sección musical. Así pues, bastante tarde, Wieland Wagner convocó a Bayreuth a dos directores de la generación posterior a Kna: Clemens Krauss para dirigir Parsifal y el segundo ciclo de El Anillo, y Joseph Keilberth para dirigir el primer ciclo de El Anillo y la nueva producción de Lohengrin. Este fue el primer año en que Hans Hotter cantó los tres Wotans, y se encuentra en una forma estupenda durante toda la obra. Por primera vez en Bayreuth, Martha Modl canta Brunilda, y ella también está en su mejor momento, con esa inconfundible voz plena y cálida. Y este fue también el primer año en que Wolfgang Windgassen interpretó Sigfrido, un papel que hizo suyo durante al menos los quince años siguientes. En 1953, canta con un volumen y una energía que lo sitúan en la línea de sus predecesores, más que de sus sucesores. Este ciclo (y el posterior bajo la dirección de Clemens Krauss) estableció las figuras principales para los siguientes cinco años: Hotter siempre como Wotan, Varnay y Modl alternando más o menos como Brunilda, y Windgassen, con una excepción, Sigfrido, y Gustav Neidlinger como Alberich. No se ha reunido un reparto más satisfactorio para El Anillo desde entonces, de hecho, ninguno que pueda igualarlo, y este lanzamiento es un merecido homenaje a su perdurable grandeza.