Detalles: El florentino Ezio Camussi (1877-1956) fue considerado por Leoncavallo "una promesa segura de nuestro arte" y apoyado en la Editorial Sonzogno de Boito y Massenet. El libreto de Il Volto della Vergine, de Paolo Buzzi, se basa en una antigua leyenda cristiana: un milagro ocurrido alrededor de 1425 en Florencia. Fra Angelico pinta al fresco el Convento de San Marcos y tiene dificultades para esbozar el rostro de la Virgen. Grazia, la hija adolescente del jardinero Fiorenzo, hermosa y enferma, pide conocer al pintor, queda fascinada con su obra y, al confesarle su amor soñado por el joven y apuesto Lionello, los rasgos de su rostro se transmiten milagrosamente a la imagen de la Virgen pintada por Fra Angelico. La doncella muere. Camussi elige un lenguaje marcadamente melódico, tanto en la escritura vocal como en el transparente apoyo orquestal; no se deja influenciar por los ejemplos solemnes y declamatorios de Pizzetti y Malipiero, y consigue crear escenas de canto cautivadoras, aunque poco personales, empleando una técnica de fragmentos temáticos recurrentes, a partir de los del delicado Preludio. En esta partitura, pensemos en el "relato" místico de Fra Angelico, en su oración a la Virgen "Canta, Mistica Rosa" que el mismo Buzzi modeló como un dulce canto, en la narración de Grazia de su encuentro con Lionello, en la intervención de las Novicias "Divin splendor" que cierra luminosamente el acto.