Detalles: EDICIÓN LIMITADA, NARANJA SÓLIDO Y BLANCO SÓLIDO, 500 PIEZAS. Françoise Hardy audicionó para Vogue Records a los 18 años y llegó a lo más alto de las listas de éxitos con su primer lanzamiento, un disco homónimo de 1962, ahora conocido como "Tous Les Garçons Et Les Filles", basado en su éxito. A partir de ahí, la famosamente tímida Hardy se convirtió en una de las pocas estrellas pop francesas de la época en cruzar el charco, viajando de Inglaterra a Francia para grabar, sirviendo de musa a diseñadores como Yves Saint Laurent e inspirando a Bob Dylan y Mick Jagger. Ese debut muestra a Hardy en su forma más simple, exprimiendo la magia pop con tintes rockabilly de la modesta percusión de jazz y la guitarra de acero. Hardy compuso la mayor parte de su propio material, lo que la diferenció de sus colegas, y en su debut compuso todas las canciones menos dos. Sus letras nunca volverían a acercarse tanto a las tradiciones yé-yé: fíjense en el "whoa-oh-oh" que resuena en canciones como "Il Est Tout Pour Moi" y su versión de "Oh Oh Chéri" de Bobby Lee Trammell. El tema principal, "Tous Les Garcons Et Les Filles", sigue siendo una visión icónica de la estética de Hardy: música franca para románticos introvertidos. "Andan enamorados sin miedo al mañana", canta en francés sobre las jóvenes parejas que ve en la calle. "Sí, pero yo estoy soltera con el alma atormentada; sí, pero yo estoy soltera porque nadie me quiere".