Detalles: Cuando se grabó este álbum en el Roxy en 1987, Jane's Addiction aún no se había convertido en los íconos del rock alternativo que pronto se convertirían. La heterodoxa fusión de hard rock, imaginería oscura al estilo de Velvet Underground y rock de flujo de conciencia no era tan centrada ni segura como lo sería en sus exitosos lanzamientos posteriores. Aun así, la banda demostró un potencial considerable. Por muy errático y autocomplaciente que sea este álbum, muchas de las canciones son irremplazables. El cantante y compositor Perry Farrell siempre estuvo fascinado por el lado oscuro de la psique humana, y esa fascinación es evidente en "Pigs in Zen", "Whores" y la atemporal canción de rock "Jane Says".