Detalles: Cody no es un álbum que lo cambiara todo para Joyce Manor, pero Joyce Manor tuvo que cambiar un poco para hacer su álbum Cody. Desde el lanzamiento de su debut en Epitaph en 2014, Never Hungover Again, el guitarrista y cantante Barry Johnson ha aprendido por sí mismo las técnicas de meditación defendidas por los Beatles y el director David Lynch, y de repente se encontró con una gran apertura. Antes, las canciones eran un trabajo; ahora eran revelaciones, apareciendo casi completamente formadas en su cabeza antes de que tuviera tiempo siquiera de escucharlas en un mensaje de voz. Para Cody, la banda acampó en el estudio durante dos meses con el productor Rob Schnapf, acreditado en clásicos de Elliott Smith, Guided By Voices, Saves The Day y Rancid, todos en las colecciones de discos de Joyce Manor, por supuesto. Con la ayuda de Schnapf, explorarían arreglos más profundos, nuevas técnicas de preproducción y diferentes formas de trabajar tanto juntos como con alguien más. Johnson dice: "Fue la primera vez que realmente aprovechamos el estudio. Sentí que podía comprender mejor lo que podíamos hacer. Siempre grabábamos como una banda punk: ¡entrar y grabar! ¡Simplemente conseguir buenas tomas! Y esta vez nos esforzamos mucho más". Para Cody, incorporaron al nuevo baterista Jeff Enzor a la banda, junto con el bajista Matt Ebert y el guitarrista Chase Knobbe. Con la valiosa ayuda de Rob Schnapf como quinto miembro de facto de la banda, Joyce Manor se sintió rebosante de inspiración. Ahora más que nunca, dice Johnson, sintió que podía confiar en sí mismo y en sus compañeros de banda para asumir los riesgos y crear la música que querían hacer. El resultado es un disco que se atreve a ser humilde, íntimo y humanamente descaradamente humano.