Detalles: Edificios ardiendo por doquier; macabros desconocidos en el sótano de tu vecino; votantes indecisos afilando sus lápices: bajo presión, podríamos decir que el regreso de Kiwi Jr. es "oportuno". Pero, ¿en qué año estamos? En su segundo álbum destrozado lanzado mundialmente por Sub Pop Records, Kiwi Jr recorre los recientes zigzags y los inminentes zags de la nueva década, entrecerrando los ojos de nuevo ante las fiestas de Año Nuevo olvidadas y los incendios poco investigados en los restaurantes de los pueblos pequeños, juntando teorías de conspiración de bajo riesgo sobre lo que se viene en 2021. Armado como un rompecabezas de mil piezas, ensamblado en estado de flujo durante el primer tramo aburrido de la cuarentena, el cantante desinfectado arrastrándose a un estudio desinfectado en tranvía, enmascarado como si fuera el tipo de trabajo en el que ser reconocido significa ser asesinado, Cooler Returns se materializa como una encuesta en expansión de los primeros bocados de los terribles años veinte, una exposición investigativa de la historia reciente enterrada bajo los titulares y los antiguos reyes enterrados bajo los estacionamientos.