Detalles: En la confluencia de la música ritual, industrial y electrónica, existe un nicho donde muchos experimentadores difuminan las fronteras entre géneros. Entre ellos se encuentran los tres miembros de Nze Nze (UVB76 y Sacred Lodge). Con máquinas secuenciadas, samplers digitales y multiefectos, fusionan instrumentales con voces guturales y relatos de guerreros de las mitologías Fang (la lengua vernácula de África Central), arreglándolo todo para crear piezas híbridas, inclasificables y desconcertantes. Los fundamentos de la música electrónica radical están ahí, pero la producción está al nivel de los grandes discos de free jazz, lo que le permite reivindicar una herencia que va mucho más allá de las propuestas modernas.