Detalles: El sencillo principal, «The Crowd», resume la atmósfera del disco. Un toque de soul sutilmente psicodélico, con un piano eléctrico lastimero y un bajo potente, su cálido paisaje sonoro evoca aventuras nocturnas de verano y una agridulce autorreflexión. "Bloom" se pasea seductoramente antes de rendirse a un estribillo tan pegadizo que debería incluir una advertencia sobre la salud. "Say Nothing" es una refrescante porción de soul de yate. "Back To Earth", con notas de cuerda disco, es contemplación bajo el sol de verano, mientras que la atmósfera de neón de "Masquerade" está coronada por un falsete supersuave del vocalista invitado Lou Stone. Por otra parte, encontramos el irresistible instrumental "Less Talk". El latido ambiental y sobrio de "Exile", que alberga algunas de las palabras más furiosas del disco ("Un océano entre nosotros no es suficiente/No te vayas"), lleva a los oyentes a la suave sanación que ofrece la sublime balada de piano final, "An Endless Wave". "Don't Call It Love" es el eje central del álbum. Como la chispa inicial que nos trajo al presente, es sin duda el corazón palpitante de esta colección, al menos espiritualmente. Swim Surreal transporta a los oyentes a otro tiempo, lugar y espacio mental. Nueve canciones que cuentan una historia que comenzó en la penumbra y, de alguna manera, aún perdura.