Detalles: Edición limitada en vinilo transparente. Seis años solían ser una eternidad en el rock and roll. Jóvenes, impulsados ​​por la urgencia de la juventud, forjan vínculos, se conectan, dan conciertos, encuentran un sello. Aclamación, agotamiento, fin y fin. Los primeros años de Teenage Fanclub estuvieron impulsados ​​por esa energía frenética (por suerte, sin el fin). Como ejemplos atípicos del sonido de la segunda ola de la joven Escocia, publicaron cinco álbumes en sus primeros seis años juntos. Los cimientos de su estatus de tesoro nacional ya estaban sentados. El décimo LP de Teenage Fanclub, Here, llega seis años después del lanzamiento del aclamado Shadows de 2010 (descrito por Uncut como "el sonido de un gran grupo que envejece con gracia"). Aquí está el trabajo de una banda con plena confianza en su propio arte: la consolidación de casi tres décadas de composición inigualable y una musicalidad casi telepática. Grabado con el técnico de sonido de la banda, David Henderson, junto con el baterista habitual Francis Macdonald y el teclista Dave McGowan en tres entornos muy distintos (inicialmente en Vega, en la Provenza rural, luego en casa de Raymond en Glasgow, antes de mezclar en Clouds Hill, en el corazón industrial de Hamburgo), es un disco que abraza la madurez y la experiencia. Como siempre, el Fanclub presenta una representación magistral de la democracia en acción, con cuatro canciones de Blake, Love y McGinley cada una. Desde el poderoso timbre de la canción inicial "I'm In Love" ("Nos desvaneceremos en la historia, estoy enamorado de ti, amor... Y me gusta tu trayectoria, estoy enamorado de ti, amor"), pasando por la extática introspección de "The First Sight" ("¿Algún día veré por primera vez un corazón sincero?") y el himno a la amistad infalible "With You" ("Me esconderé contigo de la tristeza y la mala filosofía / Me reiré contigo de la locura y la estupidez aprendida"), Here presenta una colección de doce canciones sobre lo único que realmente importa: la vida y el amor. Como corresponde a un disco que tardó en llegar, Here utiliza el espacio reflexivo con un efecto deslumbrante. "Steady State", con su maravilloso flujo y reflujo, tiene ecos del tintineo astral de The Notorious Byrd Brothers, mientras que "I Was Beautiful When I Was Alive" inesperadamente se desvía de un comienzo onírico hacia un outro semiacústico/motorik, reemplazando sonoramente el ritmo constante de la autopista alemana con los vastos cielos abiertos de la Pacific Coast Highway.