Detalles: Onimikìg [Algonquin]: (n. an.)- trueno Las piezas para flauta sin acompañamiento de Timothy Archambault para este álbum se han inspirado en la brontomancia indígena (adivinación mediante el trueno). Cada pieza resalta una técnica de flauta extendida diferente relacionada metafóricamente con los tipos de sonidos de truenos: aplausos, repiques, redobles, estruendos, inversiones y CG (nube-tierra). Un documento importante de música nueva se encuentra con la investigación musicológica contemporánea a través del Órgano ideológico de Stephen O'Malley de SUNN O))). La flauta indígena utilizada en esta grabación está hecha de cedro, una de las maderas tradicionales utilizadas por los Kichesipirini y otras tribus que viven a lo largo de los ríos Ottawa y San Lorenzo. Para los algonquinos, la flauta (Pibigwan) es la esencia del viento. A diferencia de otras naciones tribales, donde la mayoría usaba la flauta como instrumento de cortejo, los algonquinos generalmente la utilizaban para un uso singular más contemplativo, imitando los sonidos de la naturaleza o como señal en tiempos de conflicto. Cuando se requerían canciones de amor, solían ser más lastimeras, expresando tristeza, soledad o la preocupación por la partida de un ser querido. La introducción del álbum comienza con el movimiento de un collar de hueso de pene de nutria, espina de pescado, garra de oso, dientes de alce y piel de ciervo, obsequio del anciano algonquino Ajawajawesi. Su objetivo es captar la atención del oyente antes del inicio de las piezas de flauta. El gorjeo u oscilación multifónica, predominante en todas las piezas, representa tradicionalmente la vocalización gutural de la nota tónica, a veces conocida como el horizonte del que surge la melodía. Debido a la repetición de la oscilación multifónica, el intérprete respira erráticamente, creando un estado alterado que se correlaciona con prácticas ceremoniales tradicionales similares.