Detalles: Aunque para algunos es una entidad completamente nueva, los orígenes de Proscription se remontan a finales de los 90, cuando Terry "Christbutcher" Clark aún vivía en su Colorado natal, aprendiendo a armar jaleo con Excommunion. Una década más tarde, tras mudarse a Finlandia, Maveth se convirtió en su nuevo vehículo y, a lo largo de dos demos, un álbum y un CD compartido, redefinió cómo debía ser y sonar el death metal "oscuro". Y aunque la repentina desaparición de la banda en 2017 sorprendió a todos, en lugar de dormirse en los laureles, Christbutcher se comprometió de inmediato a seguir el mismo camino, aunque bajo una nueva bandera de odio: Proscription. Impulsando un sonido nuevo, más amplio y aún más oscuro, esto no es Maveth Parte 2, más aún porque Christbutcher cuenta aquí con la colaboración de una formación completamente nueva, que incluye a Cruciatus, del reconocido exalumno de Dark Descent, Lantern, quien contribuyó a la música de "Thy Black Nimbus Gate", por ejemplo. El resultado es tan majestuoso como amenazante. En resumen, este es el tipo de death metal que puede devorar mundos y exterminar toda luz. Precedido solo por una demo digital en 2018, su primer álbum, Conduit, grabado entre marzo y junio de 2019, muestra una nueva faceta de la destreza musical de Christbutcher, conservando ese toque sofocante pero pegadizo que lo caracteriza. Casi sinfónico en algunos momentos (como lo sugiere la conmovedora introducción "Four Wings Within The Samiel") y con un nuevo sentido de melodía mórbida que enfatiza aún más su gusto por lo épico, con un tema como "Thy Black Nimbus Gate" que casi sugiere la gran apertura del mismísimo Mar Rojo, Conduit no solo es una extensión de la visión única de Christbutcher, sino que la expande aún más, hasta un nivel casi apocalíptico. Esto es solo el comienzo.