Detalles: Funda troquelada. En otoño de 2013, Bry Webb ultimaba los detalles de su segundo álbum, Free Will. Lanzado el 20 de mayo de 2014, Bry, junto con su recién formada banda, The Providers, pasó los siguientes años recorriendo Norteamérica tocando en clubes, festivales y escenarios históricos como el Massey Hall de Toronto. Nada nuevo para un artista que había pasado la primera década del milenio en constante movimiento con Constantines, una banda que, en promedio, había actuado una de cada tres noches en un escenario en algún lugar del mundo. De hecho, en paralelo a la gira en solitario de Bry, se reunió con sus antiguos compañeros de Constantines para presentar una vez más su incendiario concierto en vivo y celebrar la reedición del 11.º aniversario de Shine A Light. Fue lo que sucedió al final de la década lo que parecía fuera de lugar para un artista que había pasado casi 20 años inmerso en el estudio y el escenario: la música se detuvo por completo. Bry explica sus sentimientos en ese momento: "Perdí el rumbo musical hace unos cinco años y dejé de tocar música por completo. Vendí instrumentos y equipos de grabación y me aferré a la idea de que estaba completamente acabado". Webb se dedicó a su trabajo continuo en la radio comunitaria; los meses se convirtieron en años y la vida musical parecía haberse esfumado. Ahora, en un giro inesperado, diez años después de la grabación de su último álbum de estudio, Bry no solo regresa a los escenarios, sino que también presenta un nuevo disco. Compuesto principalmente en una época convulsa, Run With Me contiene algunos de los sentimientos más crudos de Bry. Fresco y dolorosamente presente, hay una inmediatez que se percibe mientras los muros emocionales se derrumban en tiempo real. Bry explica el contexto de la creación del álbum: «A principios de 2023, mi vida personal se descontroló. Mientras lo superaba, volví a componer música y a grabar en casa. Me aconsejaron que debía aprender a pedir y aceptar ayuda de otras personas, así que envié grabaciones tempranas de canciones a amigos con veinticinco años de experiencia en la creación musical —muchos con los que no había conectado en años— y les pregunté si contribuirían en algo. La gente se acercó de una manera que me abrumó hasta el punto de llorar cuando escribí la lista de músicos para las notas del álbum. Me sentí increíblemente querido. Desde Andy Magoffin, quien grabó el primer álbum de Constantines en 1999, hasta miembros de los Cons, pasando por mis sobrinas Addy y Ella tocando la batería, y una grabación Doppler del latido del corazón de mi hija, el disco es un documento de mi vida creativa y de las personas que hicieron posible volver a hacer música». Si la portada de Run With Me me resulta familiar, es con toda la intención. El jaspeado tecnicolor y el texto troquelado del álbum señalan su inclusión en una trilogía que comenzó con Provider, el primer disco de Bry. Así como ese álbum comienza con el tema Asa, este se presenta con el instrumental Webb. La trilogía se completa con el nombre, segundo nombre y apellido de su hija, representados como las primeras canciones de cada uno de los tres álbumes. Si bien el diseño del LP indica su lugar en la colección, y temas como Older Than The Dirt y What I Do revisitan la familiar crudeza sonora de su predecesor, Run With Me es la excepción del trío. Varios temas nuevos renuncian a la quietud de Provider y Free Will, evocando claramente los ritmos vibrantes de los himnos de Constantines. Thunder Bay (con acompañamiento instrumental cortesía de The Harbourcoats circa 2009), con su bombo insistente y su pared de sonidos eléctricos, acompaña una de las melodías más indelebles de Webb, y la no tan sutilmente psicodélica Modern Mind revela una expansión de la paleta de Webb. Quizás la más alejada sea la pieza central contextual del álbum, Goodbye, donde no solo escuchamos una voz alegre que permaneció latente durante años, sino que la vemos recuperar su poder. Con el acompañamiento de Will Kidman de Constantines, Doug MacGregor y Dallas Wehrle, Bry canta a viva voz: "He terminado con toda la rabia, ahora mira cómo la luz fluye de mí". Como en toda la obra de Bry, las letras de Run With Me tardan en asentarse. Canciones de introspección, baladas de amor reconfiguradas y canciones para quienes trabajan por los demás. Abundan las canciones. Está presente en la segunda estrofa de Older Than The Dirt: «Lógica hasta la última intención, lógica en la forma en que nos mantuvimos aferrados para siempre, cantando mientras barrían el suelo», diez mil pájaros cantan una canción de advertencia en Thunder Bay y, de nuevo, en Goodbye, que narra un retorno catártico al verdadero yo con su celebración de aquellos «que cantan, cantan con alegría, con toda la alegría del lenguaje, en una sola palabra». Acompañando a Bry en las canciones de Run With Me sobre «muerte, transición y esperanza», se encuentran sus almas gemelas Jennifer Castle, Julie Doiron, Daniel Romano y Steph Yates. Todos estos cantantes elevan los sentimientos curativos del álbum y ayudan a expresar su súplica central; una especie de plegaria envuelta en la melodía tradicional gaélica escocesa de la segunda estrofa de She Is Here: «Que salga el sol por la mañana y cualquier testigo traiga. Que todo el cosmos floreciente nos enseñe a cantar». Género: Alternativo / Folk / Cantautor