Detalles: En el caleidoscópico mundo del jazz y el soul, pocas voces brillan con más fuerza que la de Gloria Lynne. Para 1974, Lynne no era solo una cantante: era una fuerza de la naturaleza, entrelazando la precisión del jazz con la intensidad cruda y sincera del soul y el pop. Nacida y criada en Harlem, llevó consigo el espíritu del barrio, desde los coros de gospel hasta el escenario Apollo, donde una victoria en un concurso de talentos adolescente la encaminó al estrellato. Su voz, suave como el terciopelo y feroz como una tempestad, se labró un espacio que le pertenecía por completo en el mundo del jazz, dominado por los hombres. Este álbum es prueba de ello. Captura el corazón de una artista extraordinaria. Una instantánea de grandes éxitos de una mujer que hizo del jazz su patio de recreo personal, a la vez que se adentraba con fluidez en el pop sin perder nunca de vista sus raíces. Este álbum es más que una colección de canciones; es un vívido retrato de una artista que construyó su carrera con determinación, gracia y una inquebrantable negativa a dejarse confinar por las etiquetas. Cada pista es un testimonio de la capacidad de Lynne de infundir estándares con su propia profundidad emocional y transformar melodías pop en declaraciones profundamente personales.