Detalles: "Solo quería ser honesto sobre todo, desde mis influencias musicales hasta mi historia", reflexiona Neal Francis. Tras años de una vida deshonesta, consumido por las drogas, el alcohol y la adicción, tal sinceridad resulta chocante en este músico de 30 años residente en Chicago. Liberado de un pasado autodestructivo y renacido en la sobriedad, Francis ha plasmado una inspirada colección de canciones impregnadas de ritmos de Nueva Orleans, blues de Chicago y rock and roll de principios de los 70. Existe una profunda conexión entre la infancia de Francis (su obsesión por el piano boogie woogie, el regalo de su padre de un LP polvoriento de Dr. John) y las canciones que ha creado. El resultado es una asombrosa colección de material sin parangón en la escena contemporánea del funk y el soul. Las influencias son inconfundibles: los estilos vocales de Allen Toussaint y Leon Russell; los ritmos de segunda línea de The Meters y Dr. John; el rock and roll de bar de The Rolling Stones; el soul gospel. de Billy Preston; la música de raíces de The Band. Francis rinde homenaje a los maestros, pero tiene su propia historia que contar: «Es la vida que he vivido hasta ahora».