Detalles: Claude Debussy escribió sobre Albéniz: «Nunca la música ha alcanzado impresiones y colores tan diversos. Uno cierra los ojos y se deslumbra al contemplar tantas imágenes». Iberia ciertamente encaja con esta descripción sin lugar a dudas, con su vívida evocación de España. Compuesta entre 1905 y 1909, la colección se divide en cuatro libros, cada uno con tres piezas. El Libro I comienza con «Evocación», que combina el fandango del sur de España con formas de canción de jota. «El Puerto» se inspiró en El Puerto de Santa María, en Cádiz, mientras que «Fête-dieu a Seville» representa la procesión del día del Corpus Christi. «Rondeña» y luego «Almería» son representaciones de pueblos andaluces, y son seguidas por «Triana», que evoca el barrio gitano de Sevilla. Goyescas, comenzada en 1909, refleja la admiración de Granados por las pinturas de Goya. (Granados llegó a componer una ópera del mismo nombre). Considerada por muchos como la obra maestra de Granados, la suite para piano consta de dos libros y se completó en 1911. Las colecciones de Albéniz y Granados son piezas verdaderamente virtuosas, que exigen al pianista un nivel extremo. Peter Donohoe simplifica los retos y presenta su selección con profundas interpretaciones musicales, propias de este artista supremo. El álbum se grabó con un piano de cola de concierto Steinway modelo D en Potton Hall, Suffolk.