Detalles: Música para piano del siglo XXI del compositor ucraniano más distinguido de nuestro tiempo, grabada por un pianista polaco que ya ha ganado elogios por sus interpretaciones de la música de Silvestrov. Con el álbum «Melodías del Silencio», Tomasz Kamieniak demostró su afinidad con la música de Valentyn Silvestrov, como ha reconocido la crítica internacional. «Se hace referencia al espectro de la literatura pianística», según Gramophone, «lo que hace que la obra de Silvestrov sea tan inclusiva como extensa. Kamieniak es una guía reveladora, y uno espera con ilusión futuras entregas de un proyecto sin igual». Esta segunda entrega continúa documentando la fecunda creatividad que Silvestrov ha encontrado en el último cuarto de siglo, especialmente en el campo de la música para piano y coro. Inicialmente, esta concentración en el piano, aparentemente como una distracción de las obras a gran escala, ha dado como resultado unas 30 horas de música, organizadas en varias docenas de ciclos de piezas cortas, la mayoría de ellas de apenas un par de minutos de duración. Silvestrov luego organizó estos "metaciclos", cada uno de ellos con una duración de más de una hora, pensados ​​para ser ejecutados como una continuidad ininterrumpida. «Ecos de Armonía» puede, por tanto, considerarse una extensión natural de «Melodías del Silencio». Los movimientos rinden homenaje a géneros consagrados: serenatas, pastorales, valses y bagatelas. Como es característico de Silvestrov, la música parece evocar continuamente un pasado schubertiano perdido, a la vez que reflexiona sobre la imposibilidad de recuperarlo. Este enfoque crea una sensación de fugacidad, donde la música parece extenderse infinitamente, suspendida en el espacio. Estas miniaturas carecen de un final claro, lo que permite que la música se prolongue, se disuelva y se detenga. Silvestrov es un pianista consumado que extrae del piano una profunda gama sonora, y sus piezas animan a los intérpretes a encontrar un punto de quietud tanto en la música como en sí mismos, sin recurrir a la estética relajante de muchos compositores de piano contemporáneos. Kamieniak mantiene una amistad personal con el compositor, y la introducción de su folleto refleja tanto la naturaleza de estas piezas como su historia compartida. "¿Deja el compositor espacio para la latitud interpretativa?", pregunta. "¿Los micro-rubatos, las micro-aceleraciones, las micro-dinámicas resonarán en cada oyente? Las preguntas abundan, y una de las más pertinentes es si un compositor tan rigurosamente en sintonía con su visión como Silvestrov encontrará alguna vez satisfacción en las interpretaciones de otros artistas además de él. En cualquier caso, Kameniak se ha convertido en uno de los intérpretes más perspicaces del compositor. Valentin Silvestrov nació en 1937 en Kiev, Ucrania. Estudió composición con Boris Lyatoshynsky. En 2022 huyó de Ucrania tras la invasión rusa de febrero. Vive en Berlín. El estilo musical de Silvestrov podría catalogarse como posmoderno. Utilizando técnicas tonales y modales tradicionales, Silvestrov crea texturas dramáticas y emotivas, cualidades que, según él, se sacrifican en gran parte de la música contemporánea. «No compongo música nueva. Mi música es una respuesta y un eco de lo ya existente», ha declarado Silvestrov. El álbum Ecos de Armonía, que incluye una colección de miniaturas para piano que abarcan desde 2005 hasta 2021, forma una narrativa musical cohesiva y a gran escala. La afición de Silvestrov por las bagatelas se hace patente en estas obras, representando su género predilecto en los últimos años. Bajo el amplio paraguas de este género, se encuentran miniaturas que incluyen serenatas, valses, elegías, pastorales, tangos, minuetos, preludios, postludios, mazurcas, canciones de cuna, momentos musicales, barcarolas y más. Música de conmovedora sencillez y encanto, que ofrece consuelo y paz. - Este álbum es el sucesor del exitoso CD del pianista Tomasz Kamieniak "Melodies of Silence" de Valentin Silvestrov.